En esta ocasión presentamos el ensayo de nuestra compañera Ingrid Serrano del Departamento de Digitalización, ganadora en la categoría: «DESDE MI PERSPECTIVA».

A modo de introducción te comento la pregunta que siempre me hace la gente:

¿Qué hace el Tribunal de cuentas?

Mediante la Ley 67 del 14 de noviembre de 2008, se deroga el Decreto de Gabinete N° 36 de 10 de febrero de 1990 y desaparece la Dirección de Responsabilidad Patrimonial de la Contraloría General de la República, dando paso a la creación del Tribunal de Cuentas, institución jurisdiccional, autónoma e independiente, con plena facultad para resolver a través de un proceso de carácter patrimonial, el resarcimiento al Estado producto de las irregularidades cometidas por servidores públicos y privados que funjan como empleados o agentes de manejo, de acuerdo a lo preceptuado en la precitada Ley.

Con la creación del Tribunal de Cuentas desaparece la Dirección de Responsabilidad Patrimonial de la Contraloría General de la República. El Tribunal de Cuentas es un organismo constitucional y legal con jurisdicción y competencia nacional para juzgar las cuentas de los agentes de manejo y los empleados de manejo cuando la Contraloría General de la República les formule reparos por encontrarles irregularidades en su actuación. Este ente jurisdiccional garantiza el cumplimiento de la Constitución Política de la República de Panamá y de la Ley en la tarea de juzgar los actos irregulares de tales empleados y agentes de manejo que afecten el patrimonio del Estado.

¡Hola! ¡Feliz día! Te voy a compartir una pequeña parte de mi diario vivir.

El Tribunal de Cuentas me dio una oportunidad laboral, la cual aprecio mucho y valoro. Correspondo realizando mi labor con diligencia y amor. Llegando temprano todos los días y estar en mi puesto siempre atenta para servir.

Me enfoqué únicamente en eso. Y no me relacionaba mucho. Hasta que un día solicitaron el apoyo de voluntarios para llevar comida a los pacientes del Hospital Oncológico y me dieron la oportunidad de llevar y entregar las donaciones. Fue una experiencia muy linda, ver a esas personas felices. Posterior a eso una amiga mía recibe la noticia que su hija menor de edad es diagnosticada con cáncer y me pide apoyo para recaudar fondos para sus gastos médicos. Solicite ese apoyo de todos mis compañeros los cuales al conocer la situación no dudaron en colaborar.

He podido ver la gentileza y el buen corazón de todos mis compañeros en las causas nobles.

Yo continue realizando mi labor y seguí en mi puesto sin relacionarme mucho. Luego enferme y quede hospitalizada, muy grave, me aislé aún más sentía que no quería hablar con nadie, estaba muy mal y le pedí a Dios que me permitiera vivir hasta los 18 años de mi hijo al menos, siempre acostumbrada a estar sola y con mis hijos. Yo estaba muy enferma al punto en que me entubaron y estuve en coma.

 Al despertar me escriben mis compañeros de trabajo y me entero de que todos estaban orando por mí, asistieron a misas dedicadas a pedir por mi salud.

Saber que estaban todos unidos para orar por mí y pedirle a Dios por mi salud, fue el mejor regalo que pude recibir porque Dios escucho todas esas oraciones.

Solo puedo decir gracias por orar por mí.

Este no solo es un lugar de trabajo normal como lo he vivido durante años en diferentes lugares desde que tengo 15 años cuando empecé a trabajar.

Es maravilloso contar en la vida con personas que están ahí cuando necesitamos, que precisamente en esos momentos nos sentimos apoyados, arropados por su apoyo y cariño. No requiere de grandes gestos, ni de visitas de cortesía, se trata de una compañía, unas palabras de ánimo, un poco de aliento.

De las personas que laboran en el Tribunal de Cuentas debo resaltar que hoy en día contamos con varios compañeros que son educadores, quienes aportan su conocimiento y experiencia para el buen desarrollo de profesionales. Por ejemplo, el Magistrado Rainier Del Rosario Franco siendo una persona tan importante y con tantas responsabilidades, toma de su tiempo para impartir clases a pesar de todos sus compromisos. Es algo de admirar.

En el Tribunal de Cuentas se apoya mucho el estudio, el poder crecer como profesional.

Del Departamento de Recursos Humanos el personal dirigido por la Licenciada Virginia siempre están atentos apoyar a los trabajadores.

Del Magistrado presidente debo decirles que nos ha sorprendido en varias ocasiones con detalles a todos los colaboradores con sus acciones y palabra. Por ejemplo: en una ocasión para rendir homenaje a todas las madres, de sus propios recursos nos regaló una rosa a cada una y una serenata con mariachis y con sus palabras nos agradeció, nos incentivó y nos motivó a ser mejores. Admiro y respeto las palabras respaldadas con acciones.

Del Magistrado Cigarruista debo decir que es estricto y se enfoca mucho en mantener el orden y es muy cortés.

El Tribunal de cuentas es mucho más que un lugar donde se imparte justicia es un lugar en donde trabajan muchas personas que como en cualquier otro lugar de pronto tenga alguna diferencia de pensamiento u opiniones, pero cuando alguien necesita ayuda, son siempre solidarios, con muchos valores y mucha humanidad.

Me siento orgullosa de ser parte del Tribunal De Cuentas